martes, 9 de septiembre de 2014

Una cebra con caballo

Solia pensar que la lógica era algo sencillo, que estaba allí para resolver todos los problemas del universo, que no hay cuestión terrenal que no deba ser sometida a sus normas. 
Alguna vez a alguién se le ocurrio saltar de un avión, logicamente estaba loco, alguna vez a alguien se le ocurrió decir que el mundo era redondo, alguna vez a alguien se le ocurrió combatir la violencia a través de la paz, alguna vez un loco probó por primera vez la langosta, alguna  vez las personas de raza negra tuvieron que ir a sentarse en la parte de atrás del autobus, alguna vez un empresario alemán arriesgó su vida para salvar judios, alguna vez un amigo comió papas fritas con helado de mantecado, alguna vez un rockero greñudo se pegó un tiro, alguna vez una pareja de novios hizo el amor en las butacas de un cine, alguna vez un chef mezcló el arróz con el mango, alguna  vez un loco interpuso su corazón al cerebro, alguna vez alguién se dedicó a vivir.
Hay algo lógico que me dice que no lo haga, pero acabo de leer lo que escribí arriba y creo que prefiero no ser tan lógico...