miércoles, 1 de octubre de 2014

Repuestos

Hoy me puse a buscar repuestos de corazón, recorrí un montón de chiveras y no encontré lo que buscaba; "las válvulas hace tiempo que ni se ven por aquí", me dijo un señor con la panza al aire; "no mijo, aquí hace más de un año que no aparecen ventrículos", me respondió la encargada de un taller de autopartes; "yo hice un pedido de miocardios hace 6 meses y todavía estoy esperando", respondió el papá de un pana que importa repuestos desde Colombia.
En vista de lo complicado de la situación, asumo que tendré que agarrar este corazón aporreado y meterle un poco de resina y fibra. Siempre que se rompe algo se me viene a la cabeza la figura de un jarrón chino, muchas astillas que serán imposibles de juntar de nuevo. El corazón es una masa fibrosa sanguinolienta que al caer debe sonar así como "PLOCH", pero no debe romperse. Seguramente deje una traza de sangre por allí por donde sea arrastrado, de hecho, es lo que le pasó al mio cuando lo traslade hasta la mesa de la cocina para limarle las esquinas y "meterle un poco de resina y fibra".
Aquí estoy metiendole, suavecito para no dejar rastros, con cuidado para no dañarlo más, aquí estoy...buscando repuestos.